Erinosis del Nogal
Eriophyes tristriatus (Nal.) y E. erineus (Nal.)
Descripción
Se dice, en general, que una planta está afectada de “erinosis” cuando sufre los ataques de ciertos ácaros microscópicos del género Eriophyes, muy abundantes y extendidos por toda España.
Las especies de ácaros eriófidos que más atacan al nogal son Eriophyes tristriatus y E. erineus. Son ácaros diminutos no perceptibles a simple vista, de 0,14 a 0,25 mm de longitud, de forma muy alargada, con el abdomen anillado transversalmente, unido al cefalotórax. Color amarillo blanquecino. Tienen sólo cuatro patas en la parte anterior del cuerpo.
Las dos especies de Eriophyes invernan en estado de hembra, agrupadas bajo las primeras escamas de las yemas terminales. Al llegar la primavera, acuden a las hojas, donde forman colonias cerca de los nervios en el envés de las hojas. Se alimentan por succión y originan las típicas agallas aplastadas en forma de costras o manchas.
Tienen varias generaciones; la primera generación, cuyo ataque se hace a las hojillas recién abiertas, es la que puede tener alguna importancia; los ataques tardíos suelen ser benignos en general.
Biología
El ciclo biológico de las dos especies es poco conocido.
Durante su desarrollo, el eriófido pasa por las fases de huevo, dos estados ninfales y adulto, siendo éste muy similar a la ninfa.
Eriophyes tristriatus es una especie seguramente deuterogínica con presencia de machos y hembras primarias (protóginas) durante el periodo estival y de hembras secundarias (deutóginas) en el periodo invernal; estas últimas tienen una morfología distinta a las hembras primarias (protóginas) y poseen espermateca para almacenar los espermios durante su fase de invernación.
En el Eriophyes erineus, en cambio, no existen diferencias morfológicas entre las hembras primarias y las secundarias.
El ciclo evolutivo que presentan los eriófidos es de corta duración, por lo que pueden darse varias generaciones anuales si las condiciones ambientales son propicias.
Síntomas y daños
La presencia de Eriophyes tristriatus se manifiesta en ambas caras de la hoja del nogal conminúsculas protuberancias en forma de pústulas, de alrededor de 1,5-2 mm de diámetro, duras al tacto y de color al principio verde claro, luego amarillento y al final rojo intenso. Cuando su número es excesivamente elevado, se produce un crecimiento irregular en el limbo de la hoja que aparece deformado, torcido e incompleto.
Seccionando estas pequeñas agallas, muestran una cavidad irregular, ocupada por huevos y por formas móviles del eriófido en todos los estados de desarrollo, comunicando con el exterior por medio de una apertura.
Las hojas de nogal afectadas por Eriophyes erineus presentan en cambio una típica erinosis que se manifiesta sobre la cara inferior con concavidades profundas recubiertas por una espesa pelusa blanquecina en la cual es posible observar, aunque estén bien mimetizadas, las colonias del eriófido. En la cara superior, correspondiendo con las zonas atacadas, se forman hinchazones brillantes, convexos, que pueden sobresalir 6-7 mm.
Las hojas atacadas presentan en conjunto un aspecto ampollado y, si el ataque es fuerte, su crecimiento se vuelve irregular, por lo que aparecen deformadas, con los márgenes retorcidos y falta de parte del limbo. Algunas incluso no llegan a extender la lámina. Seguidamente, las áreas atacadas terminan por secarse.
Periodo crítico para el cultivo
El período crítico se produce normalmente con temperaturas elevadas y falta de humedad, en primaveras cálidas y secas, y al principio del verano.